El aspecto que más apreciamos de este reconocimiento a
nuestro trabajo es que ha sido concedido por un conjunto numeroso de profesionales
del mundo de la educación y compañer@s de profesión que, sin duda, conocen la realidad de esta tarea, por eso
este premio tiene para nosotr@s un notable y profundo valor y que a su vez nos permite agradecer el apoyo que
continuamente recibimos por parte de las familias, maestr@s, seguidores y cómo no... los
caracolitos que elevan nuestras inspiración.
Esta peonza de oro va por todos ell@s y, como no, por las compañeras que también llegaron a esta emocionante final y a las que tuvimos la oportunidad de conocer, Laura, Aurora, Miren y Marta.
Vamos necesitando vitrina. ¿Alguien nos presta una o pasamos por IKEA? ;)